PHOENIX, Arizona.— El repudio a lo que se considera la propuesta de ley migratoria más estricta del país movilizó a cientos de estudiantes y activistas de diversos estados hasta las puertas del capitolio de Arizona para exigir el veto a lo que califican como la mayor violación a los derechos humanos.
El vacío de muchas vías en Phoenix por el miedo que dejaron las recientes redadas contrastó con el lleno de la calle Séptima, ubicada frente al capitolio, donde desde las 10:30 de la mañana una masa de jóvenes sorprendió las oficinas de la gubernatura con carteles y gritos de "sí se puede".
Ese primer movimiento se fue acrecentando hasta sumar casi mil activistas quienes a las 2 de la tarde ya habían tomado por completo los jardines del edifcio.
(translated)
The emptiness of many roads in Phoenix for fear left by the recent raids contrasted with the full Seventh Street, located opposite the Capitol, where from 10:30 am surprised a mass of young governor's offices with signs and shouts of "yes we can."
That first movement was increasing up to add almost a thousand activists who at 2 pm and had completely taken the building's gardens.
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